Con la nueva ley, comprar reseñas falsas para publicar en Google, Trustpilot, Amazon u otras plataformas, estará penado al considerarse fraude. Las reseñas falsas engañan al consumidor durante el proceso de compra generando desconcierto en éstos, además se realiza una competencia desleal frente a otros negocios. En DoctecWorld abarcaremos este tema tan delicado, estáte atento.
En concreto, se trata del real decreto aprobado el pasado mes de noviembre, que modifica la Ley General para Defensa de los Consumidoresy la Ley de Competencia Desleal para ampliar los derechos de los usuariosen el comercio electrónico.
hay que tener en cuenta que las reseñas y los comentarios online influyen significativamente en la toma de decisiones de los procesos de compra. En tiempos post pandemia, las ventas del comercio retail cayeron en torno al 13% y ello provocó que multitud de negocios se vieran obligados a potenciar el comercio online. Entre el confinamiento obligado del usuario y el aumento de la oferta comercial digital, el e-commerce despegó definitivamente.
Hoy en día, uno de cada tres consumidores prefiere realizar compras a través de Internet en lugar de acudir a la tienda, según el informe El sector retail en España, 2021 publicado por Brandwatch.
Casi un 40% de los consumidores considera que las opiniones de terceras personas son importantes. La gente, antes de comprar, consulta las opiniones de otros usuarios y se deja llevar por el efecto arrastre.
Un informe publicado recientemente por Apache, destaca que el 70% de los encuestados está dispuestos a gastar más en un comercio después de ver una reseña positiva, y el 47% valora las reviews online como un factor determinante para la compra (60% cuando preguntamos a la población más joven). Ante ello hay que tener mucho ojo, ya que no todas las reseñas están verificadas y muchas resultan ser reseñas falsas o compradas.
La Unión Europea lleva tiempo detrás de estas prácticas y ahora España ha traspuesto una directiva para ponerles fin mediante un decreto, con multas que pueden superar el millón de euros. La otra cara de la moneda es que acabar con este fraude no es tan fácil como pueda parecer.
¿Por qué es complicado frenar este negocio de reseñas falsas?
Las organizaciones de consumidores, que han recibido con los brazos abiertos esta medida, llevan tiempo advirtiendo de la gran cantidad de reseñas falsas que proliferan por redes sociales y grandes tiendas online. En el 2019, la OCU publicó un estudio en el que descubrió que un 8,2% de los productos de Amazon tenían una “valoración alterada de forma significativa por opiniones no naturales”, una cifra que se reduce 6,2% en el caso de TripAdvisor y a 2,1% en el de Booking. La pandemia agravó la situación. Aquel año, un estudio de FakeSpot estableció que el 42% de una muestra de 720 millones de textos eran “poco fiables”, seis puntos más que el año anterior.
Es preocupante ya que, en el mundo ‘online’ todo sigue manipulable de alguna manera u otra. Cualquier persona puede abrir un correo electrónico, hacer una compra y dar una valoración, aunque otra cosa son las intenciones que se tenga detrás. Muchas veces son amigos, familiares o incluso empleados de los propios empresarios, que piden que lo hagan para mejorar su reputación.
No siempre es fácil identificar al culpable, porque aquí también puede haber acciones de falsa bandera. Se han visto casos de competidores que compraban ‘reviews’ falsas para que el ‘marketplace’ tumbara o hundiera la reputación de un producto.
¿Qué se está haciendo al respecto para acabar con las reseñas falsas y engañosas?
Para poner fin a este tipo de prácticas, este 28 de mayo entró en vigor en España el Real Decreto-ley 24/2021, que modifica tanto la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios como la Ley 3/1991, de 10 de enero, de Competencia Desleal.
Esta directiva argumenta que «los consumidores confían cada vez más en las reseñas y aprobaciones de otros consumidores cuando toman decisiones de compra» y por ello pasa a considerar una práctica «desleal por engañosa» añadir o encargar a alguien «que incluya reseñas o aprobaciones de consumidores o usuarios o aprobaciones sociales con el fin de promocionar bienes o servicios» La ley también penaliza poner en valor valoraciones añadidas por consumidores «sin tomar medidas razonables y proporcionadas para comprobar que dichas reseñas pertenecen a tales consumidores y usuarios».
Las sanciones leves irán de entre 150 y 10.000 euros, las graves entre 10.001 y 100.000 euros y las muy graves entre 100.001 y 1.000.000 euros.
En conclusión:
Esperamos que este artículo haya sido de ayuda, compártelo con tus amigos o familiares para que sepan cual es la nueva ley que pone en jaque a las reseñas falsas en comercios electrónicos.